Pensamiento libre sin ideología es como coito asistido

viernes, 27 de diciembre de 2013

Poder Paralelo. Por Agustín Haya de la Torre

Mes y medio después de estallar el escándalo de Óscar López Meneses, el gobierno sigue sin

informar quién dio la orden ni qué hacía para que decenas de policías y patrulleros lo cuiden durante casi dos años.

La explicación oficial que trata de presentar el caso como “corrupción policial” no convence a nadie. Ni la renuncia del ministro del Interior ni la destitución de varios oficiales aclaran el asunto. Tampoco los insultos del Presidente contra el operador de Vladimiro Montesinos, pues durante seis semanas el Ejecutivo ha convertido en un sainete su intento de tapar el sol con un dedo y desvirtuar las investigaciones.


Los registros de la prisión de San Jorge aparecen y desaparecen mientras los ministros dicen tonterías cada vez. Confirman así la responsabilidad directa del gobierno, que por todas las formas posibles evita que sepamos las razones para tan exagerada protección de un particular.



Algunos soslayan la gravedad del caso y olvidan lo que vivimos en los noventa. Entonces Alberto Fujimori organizó a través de su servicio de espionaje, un esquema de poder que le permitió controlar a las fuerzas armadas y policiales, a la judicatura y, encima, sobornar a los grandes medios de comunicación.

El diseño dictatorial resultó ambicioso y de envergadura porque pretendía perpetuarse en el poder. El soplonaje al interior de los institutos armados le servía para promover a los adictos y descabezar a los críticos. Lo mismo sucedió en el Poder Judicial donde su influencia llegó a disfrazarse como reformista al punto de contratar a la ONG más pintada en el tema.

Con la televisión y la prensa, Fujimori alcanzó uno de sus puntos más eficaces. Con operadores ad hoc usó la farándula para distraer a la gente. Fomentó un penoso espectáculo de lo grotesco y el mal gusto. Cómicos, bataclanas y animadoras, junto con los pasquines amarillos, llevaron la cultura chicha a su clímax.

Todo esto encubría algo más siniestro: los negocios turbios de las licitaciones amarradas, el narcotráfico y el contrabando a gran escala. El esquema de Fujimori y su brazo derecho requería no solo astucia sino grandes cantidades de dinero, saqueado del fisco o proveniente de las coimas.

Quien dirija tal mafia necesita mucha protección, como los centenares de hombres del batallón “Júpiter”. Montesinos pasó su entrenamiento como agente de potencias extranjeras desde los años setenta. López Meneses, uno de sus colaboradores, conoce las formas pero carece de las habilidades de su jefe.


Por lo que sale a luz, todo indica que empezaba un camino parecido. El alumno metía ya sus narices en la vida militar y policial para mover los ascensos y seguramente montaba la soplonería sobre los adversarios. Descubrir a Montesinos demoró varios años y si no fuese por su manía de filmarlo todo, no nos habríamos enterado a plenitud de sus delitos y menos verle la cara a los vendidos.

Ojalá la comisión parlamentaria y la Fiscalía revelen los oscuros menesteres del aprendiz de brujo.

lunes, 23 de diciembre de 2013

El reino de la mentira, el miedo y el odio

Por: Jaicec Espinosa Sandoval
       Víctor Raúl Trujillo de Zela


Vergüenza nos da ver cómo el gobierno conyugal intenta salir del espiral de mentiras en el que él mismo se ha metido, pisoteando primero a la Policía Nacional y ahora subordinando sin desparpajo al Legislativo. Pero aquello no les ha bastado, pues el país entero ha visto como la jefa de la Oficina de Coordinación Parlamentaria de la PCM, Malka Maya, maltrata a los parlamentarios manteniéndolos sumisos ante las órdenes dictadas desde Palacio de Gobierno, ya que el mismo César Villanueva, jefe de la PCM, ha dicho no saber quién es esta todopoderosa coordinadora, que en teoría está bajo su mando.

Por otra parte, todos pudimos apreciar cómo el congresista Víctor Andrés García Belaúnde, quien ganó su curul como parte de la lista del aliado del gobierno, el inefable Alejandro Toledo, se ha presentado ante el presidente Humala para, en palabras de ambos, conversar sobre la comisión que él preside y que investiga unos de los escándalos políticos más graves desde que volvió la democracia al Perú y que involucra al mismísimo presidente Humala, quien hasta hoy no responde por los innumerables testimonios que lo contradicen y que afirman que su amistad con Óscar López data de sus épocas de adolescente, como lo dijo su propio padre, y que incluso de capitán fue jefe del piquete militar que resguardaba la facultad de odontología donde trabajaba Óscar López.

En otros ámbitos, tal como hemos adelantando en columnas anteriores, el resultado al que arriban las pesquisas de la "megacomisión" que investiga la gestión del expresidente Alan García, es por no decirlo de otra forma: Previsible, tendencioso y por demás incoherente. Debido a que el mismo presidente de dicha comisión, Sergio Tejada, afirmó que no hay indicio alguno de delito por el cual se le pueda acusar al líder del Apra, lo que demuestra que el informe ha sido redactado por la pareja presidencial para allanar el camino de la reelección conyugal, como sucedió en Argentina con calamitosos resultados, para lo que se debía sacar de carrera política al expresidente Alan García, quien debido a su gran gobierno que redujo la pobreza a la mitad, se convierte en el principal adversario del proyecto chavista y por tal, la figura a inhabilitar políticamente, pasando para eso hasta por encima de la justicia.

Así, el panorama que nos deja el accionar de estas dos comisiones de "medio pelo" es el fiel reflejo de la gestión del gobierno, deficiente y totalitaria, que olvida que la separación de poderes es un requisito indispensable para la democracia y que al no superar lo hecho por anteriores administraciones, intenta destruir todo lo que por desidia, corrupción e ineficiencia no puede construir.

jueves, 19 de diciembre de 2013

Bachelet vuelve por la izquierda

Michelle Bachelet alcanzó una notable votación del 62% en su reelección como presidenta de Chile. No hay que olvidar que acabó su periodo anterior con más del 80% de aprobación, caso raro entre los mandatarios latinoamericanos que normalmente terminan muy desgastados.

La Nueva Mayoría que encabezó la lideresa del Partido Socialista, sin perder a los componentes históricos de la Concertación Democrática que reabrió “las grandes alamedas de la historia” tras el oscuro período dictatorial de Augusto Pinochet, trae novedades significativas, tanto programáticas como orgánicas.

El gobierno de Sebastián Piñera, el primero de talante conservador elegido tras la larga hegemonía de la Concertación, respetó los términos constitucionales pero no dio la talla para generar apoyo a sus medidas neoliberales. Más bien sirvió de blanco para criticar la privatización de la educación impuesta desde la dictadura, esquema que los gobiernos siguientes no modificaron.

La protesta estudiantil ganó las calles y fraguó un nuevo liderazgo universitario, en su mayoría militantes de la izquierda. Las enormes y sostenidas movilizaciones reclamaban el fin de un modelo excluyente, que convirtió a la educación pública en una de pago. Camila Vallejo, joven comunista, se erigió en el símbolo de la rebeldía y las consecuencias de la fuerza desatada sensibilizaron a las dirigencias. Así por primera vez desde la nueva etapa que vive el país del sur, el arisco Partido Comunista aceptó incorporarse a la coalición de centro izquierda y sus héroes juveniles encontraron la forma de llegar a la Cámara de Diputados.




Michelle Bachelet lanzó su candidatura con una propuesta renovadora. Recogió la protesta estudiantil para incluirla como uno de sus principales puntos programáticos. La reforma de la Constitución, pesada herencia del militarismo, ocupa un lugar privilegiado en el programa democratizador de la candidata socialista. Un cuarto de siglo después, el momento de ponerle punto final a los rezagos del autoritarismo y poner como eje la búsqueda de la igualdad y la cohesión social, encuentra una correlación propicia.

Los retos del nuevo gobierno no son pocos, pues la vara la coloca bastante alta, confiada en que va a dirigir una sociedad madura e integrada, donde la extrema derecha parece un recuerdo del pasado y los nuevos conservadores practican la pluralidad y defienden el estado de derecho.

Una sorpresa desconcertante resultó el alto nivel de ausentismo, como consecuencia del voto voluntario. Sorprendente porque la sociedad sureña posee un alto nivel de civismo. La conversión del voto de un deber en un derecho como que los impelió a librarse de una obligación. Ello no deslegitima en absoluto el triunfo puesto que como sucede en las democracias con voto no obligatorio, los inasistentes no confrontan los resultados.

Bachelet representa, pues, un nuevo y valedero esfuerzo por plasmar un nuevo modelo de democracia social
en la región.                              

miércoles, 18 de diciembre de 2013

La educación: Ayer, hoy y mañana

Por: Víctor Raúl Trujillo de Zela*

El pensamiento y la tecnología prevalecientes en determinado tiempo y espacio han sido siempre determinantes para el desarrollo de sus generaciones. Así, la Revolución Industrial dio origen, primero en Gran Bretaña y luego en el resto de Europa, a una transformación transversal de todas las estructuras de la sociedad de la época, lo que permitió la masificación de la educación, priorizando la homologación de los conocimientos de lo alumnos por sobre el desarrollo de las diversas aptitudes de cada uno de estos, modelo que hasta ahora perdura en la gran mayoría de los sistemas educativos, pero que en los países más avanzados ya ha comenzado a cambiar, teniendo como experiencia pionera a las universidades de Oxford y Crambridge en Inglaterra, donde se imparte una educación personalizada en la que los alumnos más que asistir a clases, trabajan junto a un tutor que los orienta por todo un año, lo que en ingles se denomina reading with the master.

Esta educación, basada en el desarrollo y fortalecimiento de las aptitudes de cada alumno, es la gran revolución educativa que tiene que comenzar a darse para poder estar a la altura de los cambios tecnológicos y así poder aprovechar al máximo sus beneficios para el desarrollo económico y social de nuestros pueblos, pues sin una adecuada educación no será posible el desarrollo. Para ello importantísimo saber definir cuál es el tipo de alumno al que habrá que educar para así poder saber cómo se le podrá guiar. Pues en la era de la información, no es la acumulación de conocimientos lo que determinará el nivel del alumno, sino la manera en que los alumnos interactúan y ordenan la infinita información disponible para poder generarse su propio conocimiento que les permitirá desarrollarse según sus propias habilidades y necesidades.

Para esto es básico que la educación no se restrinja a la escuela, pues la sociedad sigue siendo la gran escuela de ciudadanos, siendo su cultura el resultado de la interacción de estos. Por lo que es fundamental el papel de los líderes políticos, intelectuales y de opinión, quienes son los encargados de interactuar con los ciudadanos para poder representar el sentimiento de estos. Lamentablemente pocos lo han entendido así, limitándose a utilizar las TIC (Tecnologías de la Información y Comunicación) para exponer sus ideas pero no para interactuar con sus usuarios, que en su gran mayoría son los “Nativos Digitales”, como se les denomina a los nacidos posteriormente a los años 80´s del siglo pasado, cuando el uso de las tecnologías digitales comenzó a hacerse masivo. Y es que gracias a las TIC estos han desarrollo diversas maneras de sentir y comprender el mundo, llegando a desarrollar sus propios códigos de comunicación; es decir, su propio lenguaje.

Se agradecen los valiosos aportes del jurista Arturo Seminario Dapelo y del dirigente universitario Jaicec Espinosa Sandoval.

jueves, 12 de diciembre de 2013

Autonomía para la universidad. Por Agustín Haya de la Torre

La prueba PISA y los rankings internacionales sobre las universidades muestran la precariedad de la educación en el Perú. No solo no formamos adecuadamente a nuestros niños y adolescentes, sino que tampoco somos capaces de darles una educación superior de nivel.



Los resultados no son gratuitos, devienen directamente de un modelo impuesto en los noventa que supone que todo lo asigna el mercado, que en el caso peruano llevó a despreciar de nuevo la educación pública. Paradójicamente los promotores ideológicos de tan penosa situación insisten en atribuir el fracaso a lo público, a cuya mejora presupuestal suelen oponerse por principio. Generan así un círculo perverso que produce una enseñanza muy deficiente.

La mayoría de comentaristas de los exámenes de la OCDE cree que todo se soluciona con más privatización, incluso proponen, desubicados, el modelo de Pinochet, fracasado estrepitosamente en Chile, que acabó por aumentar la desigualdad y deteriorar una educación tradicionalmente de nivel a límites casi peruanos.

En el caso de las universidades la varita mágica la colocan por el lado de la acreditación ministerial, para lo cual ya funciona una entidad que ahora tratan de consagrar en la propuesta superintendencia universitaria. Decenas de indicadores formales, básicamente de carácter administrativo, aparecen como requisito.



La confusión entre formas de gestión y la esencia misma de la universidad, que es la producción de conocimiento, traerá una vez más consecuencias nefastas. La exigencia histórica de las universidades clásicas fue siempre la autonomía del poder para conseguir las condiciones que garanticen la creación científica. El conocimiento nace de la libertad y la investigación tampoco puede sujetarse a la inmediatez del costo beneficio, por la razón elemental de que su sustento es el ensayo y el error.

“La universidad es lo que publica”, dice un viejo adagio, por ello que las clasificaciones válidas toman como eje central los criterios bibliométricos, es decir lo que sale a luz en revistas científicas y en los libros de los investigadores, como resultado de su trabajo. La calidad de la formación profesional proviene de dicho contexto, que supone la generación de condiciones para que el profesor sea sobre todo un investigador.

La prestigiosa Asociación Alemana de Sociología acaba de lanzar una crítica demoledora contra la acreditación administrativista, que llega al extremo de aplicar los estándares ISO para las universidades como si fueran empresas productivas. Felizmente que las universidades de excelencia en el mundo promueven la evaluación científica sobre la base de resultados bibliométricos y el reconocimiento internacional. 



Una buena gestión es necesaria, qué duda cabe, pero el control burocrático jamás reemplazará la investigación ni la producción de conocimientos, que requieren libertad, por tanto autonomía del poder político y económico.                                

lunes, 9 de diciembre de 2013

Las Asociaciones de Consumidores y el rol regulador del Estado

Por: Víctor Raúl Trujillo de Zela

La institucionalidad es uno de los principales problemas del país, por ello saludamos que en la defensa de los consumidores se vayan consolidando las políticas públicas recogidas en su norma especial y que uno de sus principales soportes, como lo son las asociaciones de consumidores, vayan adquiriendo presencia en la agenda pública. Se acaba de realizar el II Encuentro Nacional de Asociaciones de Consumidores, que contó con la presencia del Dr. Hebert Tassano, Presidente del INDECOPI y su Equipo Técnico, y donde se trataron los temas relacionados con los avances del Sistema Integrado de Protección al Consumidor, los alcances de las normas que regulan la intervención de las Asociaciones de Consumidores, y el rol que cumplen.

Uno de los puntos álgidos que se trataron, fue el referido a la regulación que ejerce INDECOPI sobre el reconocimiento de Costos y Costas en las denuncias que se tramitan en los Órganos Resolutivos, donde se disponen pagos irrisorios de entre S/.100 y S/.300, limitando escandalosamente el derecho de los consumidores a la debida defensa, sin mencionar los gastos colaterales en que se incurren, lo que hace más prohibitivo el derecho a denunciar y peor aun cuando se trata de demandas que se originan en provincias.

Ante esto, INDECOPI tuvo que admitir que se deben revisar los parámetros de los criterios para determinar montos más realistas y justos, haciendo más patente ello, cuando se sabe que en los casos de denuncias por competencia desleal entre empresas, tramitados en esa misma institución, no se les limita este derecho, presentándose una preocupante discriminación que afecta a los que estamos en desventaja ante el poder económico de los proveedores. 

Otro acuerdo alcanzado es el de la Capacitación, en ambos sentidos. Por un lado, dar acceso a los representantes de las Asociaciones para poder participar, sin costo, en los diferentes talleres técnicos que dicta INDECOPI. Por el otro, se presentó una propuesta para que se disponga, con carácter de cumplimiento obligatorio, capacitar a todo el personal, incluyendo a sus accionistas y directivos, de las empresas que incurran en reiteradas infracciones, a fin de cultivar la Cultura de Buenas Prácticas. Finalmente, el pasado mes, fueron elegidos los tres representantes de las Asociaciones de Consumidores ante el Consejo Nacional de Protección del Consumidor (órgano de coordinación en el ámbito de la Presidencia del Consejo de Ministros) que preside INDECOPI.

Ello significa que quienes creemos en el mercado, dentro del marco de una democracia social, somos partidarios del rol regulador del estado, que es justamente el que evita los excesos del llamado neoliberalismo o capitalismo salvaje en palabras del Papa Francisco, por lo que saludamos la multa de $13 mil millones impuesta por el Fiscal General y Secretario de Justicia de Estados Unidos a los bancos usureros y agiotistas, que no tuvieron ningún reparo en vender y revender hipotecas sin valor a millones de incautos compradores, tal cual lo afirma con mucha certeza y colocándose en el justo medio del espectro político, el expresidente Alan García, felicitaciones por eso.

jueves, 5 de diciembre de 2013

Mala educación. Por Agustín Haya de la Torre

El último ranking sobre la calidad de la educación en 65 países publicado por la OCDE, vuelve a
ubicar al Perú en el último puesto. La prueba que evalúa a los estudiantes en comprensión lectora, matemáticas y ciencias, coloca a nuestros alumnos a distancia considerable del promedio.

Desde el 2001 en que empezó a tomarse quedamos al fondo de la tabla y en algún momento al gobierno de turno no se le ocurrió mejor cosa que suspender su aplicación. Todos los años en los más importantes eventos públicos y privados el tema ocupa lugar prioritario en la agenda, sin que hasta ahora pueda corregirse nada.

La crisis la arrastramos de mucho tiempo pero se agravó con el peso ideológico que alcanzó el neoliberalismo criollo en los años noventa. La educación fue colonizada por el mercado, asumiéndose que debía orientarse hacia el “emprendedurismo” para lo cual debía aligerarse el contenido de la currícula, a fin de no hacer perder el tiempo a los estudiantes en tan mercantil propósito.




El esquema profundizó el abandono de la educación pública, ya bastante venida a menos, lo que generó una penosa combinación de maestros mal pagados con derechos sociales recortados, pésima infraestructura y cursos simplificados que dejaban de lado aspectos fundamentales de la enseñanza en ciencias y humanidades.

Los países que encabezan los rangos educativos en el mundo, entienden la educación como un derecho fundamental a cargo del Estado, prácticamente gratuita para favorecer la igualdad. La iniciativa privada, cuando existe, es concertada con la autoridad.

Los cursos en los diferentes niveles promueven una formación científica y humanista, a partir de una exigente calificación del maestro. Incluso en el nivel técnico reciben una instrucción rigurosa y de calidad, en sociedades donde el valor predominante es la igualdad, donde la lectura es una costumbre.

Cursos básicos en los colegios peruanos desaparecieron desde los noventa, fenómeno que junto con la menor exigencia y el desprecio por la lectura culta en un país sin bibliotecas, nos ha llevado al desastre.

Resulta impresionante la negación de las élites nativas de la educación pública, maltratada por la equivocada percepción de que solo es una educación para pobres y por tanto nunca pasará de una pobre educación, salvo que se privatice.

No hay que descubrir la rueda para mejorar nuestro bajo nivel educativo. Basta con entender cómo consiguen un alto grado de calidad quienes ocupan por décadas los puestos de vanguardia. Ello exige un radical cambio de mentalidad que retome la enseñanza de las ciencias y las humanidades a partir de las fronteras del conocimiento y el impulso de la cultura. Tarea que corresponde al Estado como una de sus principales responsabilidades soportado por el consenso social.

Un acuerdo de fondo en el tema resulta vital si no queremos que el crecimiento solo sea uno de baja calidad, con una sociedad inculta y sin normas, lo que ahondará la desigualdad y nos marginará en la globalización.

lunes, 2 de diciembre de 2013

Algo se pudre en Palacio de Gobierno

Por: Víctor Raúl Trujillo de Zela

Una vez más la Sra. Heredia se ha entrometido indebida e ilegalmente en la política nacional, hablando ante la prensa sobre el affaire López Meneses, en clara certificación de que es ella la que lleva la voz cantante del gobierno, burlándose una vez más de las leyes y protocolos que rigen en todo estado de derecho de un país democrático como el Perú. Demostrando que el gobierno familiar sigue empeñado, aunque el presidente del consejo de ministros no quiera darse cuenta, en el proyecto de la reelección conyugal. Por eso es que la verdadera jefa de palacio de gobierno es siempre la que tiene la última palabra, mostrándose incluso desafiante con la verdadera oposición que la intenta contener.

Así, no hay que dejarnos sorprender por la Sra. Heredia cuando pide que la investigación sobre los vínculos de López Meneses con el poder se haga desde los años 90s, pues esto sería solo una cortina de humo para tapar los actuales nexos de dicho personaje con palacio de gobierno. Queriéndonos hacer olvidar por ejemplo que en el congreso, mediante la “Comisión Waisman” desfilaron más de mil personas y se le abrió proceso a otras 300 por sus vínculos con la mafia montesinista. Habría que recordarle también a la Sra. Heredia que la gran mayoría de “investigadores” de dicha mafia, son ahora parte de su círculo más cercano, como Omar Chehade que fue procurador especial anticorrupción y Pedro Cateriano que también fue procurado especial junto al tristemente célebre Juan Jiménez Mayor.

Al ser este el peor escándalo político de los últimos años en el Perú, el presidente Humala se ha visto en la obligación, aunque sea solo formalmente, de desprenderse de sus dos principales colaboradores, el coronel Adrián Villafuerte y el exviceministro del interior Iván Vega, quienes despachaban directamente con él. Por lo que es imprescindible que en el Congreso de la República, por ser el poder fiscalizador y el foro político por excelencia, y para muchos el primer poder del estado, se cree una comisión investigadora multipartidaria de ocho miembros al ser ocho las bancadas en el congreso, con el voto dirimente de quien la presida, quien además no debe ser miembro del partido de gobierno ni de sus satélites. Porque la tarea de descubrir quién dio la orden de resguardar la casa de López Meneses con ochos patrulleros, tanquetas y portatropas, no es difícil ni mucho menos tiene que demorar seis meses.

Finalmente, hacemos un llamado a Óscar López Meneses, “Junior” como lo llaman sus familiares y amigos, para que colabore plenamente con las investigaciones y no se deje asustar y menos reconciliarse con aquellos que lo han denostado públicamente, negando una amistad que bien sabemos se remonta a los años de cadete del presidente Humala, pues uno de sus grandes amigos y compañero de promoción, ha sido el coronel EP del arma de inteligencia, Oswaldo Zapata, quien fue marginado este año de la lista de ascensos pese a ser un oficial de primera línea.