Pensamiento libre sin ideología es como coito asistido

martes, 25 de febrero de 2014

La izquierda antichavista. Por Luis Zaldívar

La ola de protestas en Venezuela que ha puesto en jaque a la dictadura de Nicolás Maduro han sido erróneamente interpretadas por algunos analistas como el resultado de un proceso impulsado desde la derecha, incluso algunos –como la izquierda peruana-  han copiado el discurso del chavismo calificando de “fascistas” a los jóvenes protestantes que están cayendo asesinados por grupos paramilitares armados por el gobierno. Pocos han intentado ver quiénes son los que protestan y quienes conforman la oposición a la dictadura.

La Mesa de Unidad Democrática creada en el 2008 aglutina no sólo a los partidos históricos como Acción Democrática y el COPEI, sino a diferentes partidos y movimientos de izquierda que van desde el Movimiento Hacia el Socialismo (de tendencia trotskisa) hasta el comunista Bandera Roja (el partido maoísta hermano del peruano Patria Roja), los cuales manejaban una buena cantidad de sindicatos antes de la llegada del chavismo, y fueron atacados por la dictadura con el afán de consolidar el partido único. Así mismo, la oposición chavista cuenta con los movimientos locales de Derechos Humanos (esos que se han quedado callados en otras partes), como son la Vanguardia Popular. El mismo partido de Leopoldo Lopez, Voluntad Popular, no tiene ni atisbos de filosofía conservadora en sus estatutos, más bien definiéndose en redes de activistas que son más parecidos a los movimientos de izquierda peruanos.


El movimiento estudiantil, a su vez, tiene como líderes a miembros de agrupaciones como Un Nuevo Tiempo – de izquierda democrática –, el Movimiento 13 de Marzo – relacionado a Voluntad Popular- y la Unión de Jóvenes Revolucionarios –relacionado a Bandera Roja- ninguno de las cuales pudiese decirse son organizaciones de derecha. Ni que decir de los cientos de miles de jóvenes que sin partido político han salido a protestar pidiendo democracia. Sólo para un comunista demasiado ortodoxo puede pensar que pedir libertad y democracia es sinónimo de derecha.


El fondo del problema es que ciertos analistas no han comprendido la democracia e insisten que el ganar elecciones es suficiente, sin tener en consideración que el chavismo ha cooptado los diferentes poderes y restringido la libertad de expresión, al punto de violar los derechos humanos, que son la base de cualquier plataforma de izquierda moderna. No hubiese otra razón por la cual los principales partidos de izquierda venezolana están en contra del chavismo; la reacción simplona de algunos peruanos en tildar de “derechista” a la oposición venezolana demuestran un conocimiento mínimo sobre la realidad política del país caribeño.

El pronunciamiento del Frente Amplio de Izquierdas a favor de Maduro en el Perú nos da una excelente oportunidad de volver a arrebatarle a estos personajes el concepto de izquierda. La izquierda que busca la libertad y la justicia social, hacia allá nos dirigimos. 

Triángulo para O’higgins. Por Agustín Haya de la Torre

Los gobiernos de Perú y Chile cumplen su compromiso de respetar el fallo de la Corte Internacional de Justicia y organizan la fijación de las coordenadas precisas del nuevo límite marítimo.

Surge un debate peculiar cuando Santiago reclama el triángulo terrestre formado al tomar como referente para medir la frontera marítima el Hito 1 y no el punto Concordia. Dicho extremo del fallo crea un triángulo de unas tres hectáreas y media que de pronto empiezan a revindicar.

La postura carece de fundamento, pues la frontera terrestre quedó claramente establecida en el Tratado de 1929. Al parecer sirve de desfogue para el “lamento profundo” que les produjo a las autoridades chilenas perder 50 mil km2 de mar.

El tema debe tratarse con firmeza para impedir que devenga en un nuevo e innecesario conflicto. Más bien puede convertirse en la ocasión para mejorar las relaciones y avanzar en una voluntad integracionista.

Rescatemos como símbolo de tal propósito la figura de Bernardo O’Higgins, Libertador de Chile y Gran Mariscal del Perú. Hijo natural del virrey Ambrosio O’Higgins con Isabel Riquelme, conocido como Bernardo Riquelme hasta los 24 años, recibió el reconocimiento del padre quien lo educó encargándolo a conocidos suyos.


Su formación lo llevó a ingresar por su condición social, a un Colegio de Naturales donde estudiaban los hijos de los caciques mapuches. Luego vino a Lima al Colegio del Príncipe y a San Carlos, para finalmente ingresar a un colegio cerca de Londres, donde su profesor de matemáticas fue Francisco de Miranda, el gran prócer de la libertad americana, más tarde Gran Mariscal de Francia. Pronto descubrió el fuego de la revolución y adhirió con ardiente convicción a las ideas del maestro, aunque ello le valiera el enojo del padre.

O’Higgins se convierte en un actor crucial de las guerras de independencia. Capitán General del ejército patriota, acompaña a José de San Martín en el Ejército de los Andes. Vive todos los avatares de las victorias y derrotas hasta Chacabuco y Maipú. De 1817 a 1823 ocupa el cargo de Director Supremo de Chile y su papel resulta decisivo en la formación del Ejército Libertador del Perú, donde si bien los oficiales son argentinos, la tropa es mayoritariamente chilena, al punto de que marchan bajo su bandera.


El enorme costo de dicha campaña repercute en las finanzas de su gobierno, lo que lo lleva a una paradójica abdicación ante el Senado, en medio de los vítores y los aplausos de las masas al héroe de la libertad.



Vuelve al Perú, a su casa limeña y a su hacienda Montalván en Cañete, donde muere en 1842. Tuvo tiempo para interceder entre las tropas de Santa Cruz y las chilenas de Bulnes para evitar la derrota de la Confederación de Perú y Bolivia.

¿Porqué no dedicamos el triángulo a un gran memorial a Bernardo O’Higgins, donde recordemos los fastos del Ejército Libertador y a quienes como San Martín y Miranda pensaron que debíamos ser una sola gran república americana?

lunes, 24 de febrero de 2014

Alan avanza en el Perú y en América Latina

Por: Víctor Raúl Trujillo de Zela
        Jaicec Espinosa Sandoval


Mientras la figura del conductor del Apra crece en el Perú y en América Latina, posicionándose a nivel continental como líder indiscutible de la democracia con justicia social, por estos lares la zurda peruana encabezada por el acaudalado empresario capitalista Salomón Lerner Ghitis se arrodilla ante la dictadura de Maduro, defendiendo al corrupto régimen de todos sus crímenes que en la última quincena suman 10 jóvenes muertos. Y que encima tiene el descaro de usar a los esbirros de la dictadura castrista, quienes siguen llegando a Venezuela para apoyar la represión contra los jóvenes que luchan por recobrar la democracia y cambiar el sistema económico hambreador que ha condenado a la miseria absoluta a un país tan rico en petróleo, ante el silencio cómplice de la mayoría de gobiernos latinoamericanos, de la OEA y otros organismos más. Y no es cierto que aquellos que repudiamos a la fraudulenta administración de Maduro seamos instrumento del imperialismo norteamericano, como les gusta decir a la zurda peruana y hasta al mismo Maduro, quien en su cinismo le vende miles de millones de dólares en petróleo a los Estados Unidos.

Por eso es oportuno señalar que el mitin del Partido del Pueblo, celebrando el nacimiento de su fundador Víctor Raúl Haya de la Torre en Campo de Marte el viernes pasado, ha sido uno de los más concurridos y enfervorizados de los últimos lustros, en el que el expresidente Alan García ante decenas de miles, ha reiterado la validez de la doctrina del Apra y su inquebrantable vocación por instalar en toda América Latina una democracia de pan con libertad; es decir, una democracia con auténtica justicia social, que significa crecimiento económico con reducción significativa de la pobreza, dentro de un concepto integracionista de libre comercio con todos los bloques que se vienen formando en el mundo, bajo los valores de la democracia representativa. Como se hizo durante los 5 años del segundo gobierno de Alan García en el que la pobreza se redujo de 48% a 28%. Los demás son paliativos y no contribuyen al desarrollo económico y sostenible de los países. Por ello el líder del Partido del Pueblo, hace bien en señalar cuando dice que el próximo gobierno del Perú tiene que ser de ancha base para poder defender estos principios y así llegar al bicentenario de la república logrando realizar la justicia social en el país, cumpliendo el compromiso histórico del Apra con el pueblo.

Además, nos satisface plenamente coincidir con el líder del Partido del Pueblo en su compromiso de renovar la dirigencia de su partido e ir preparando a los jóvenes para asumir la conducción de nuestro movimiento y, sobre todo, para desempeñarse con eficacia, eficiencia y pasión para trabajar por el Perú a cambio nada más del honor de servir a la patria.

martes, 18 de febrero de 2014

La Lucha Venezolana y la Hemiplejia Moral. Por Enrique Valderrama

El socialismo autoritario está de retroceso en el mundo. Tanto en su influencia desde la sociedad civil, la academia y en los pocos gobiernos que regenta desde los cánones que su modelo medieval plantea. Y digo medieval porque la experiencia demuestra que cuando gobiernan van suplantando las libertades obtenidas por el republicanismo e instalan una reedición descontextualizada de absolutismo propio del Medioevo; en Cuba gobierna el hermano de Fidel Castro, perpetrando más de 50 años de dictadura y de condena al pueblo cubano. En Venezuela gobierna Maduro en buena parte por ser el receptor de un amague de entrega de la “espada de Bolívar”  poco antes de morir por parte de Hugo Chávez Frías; una suerte de opereta tétrica que podría tener su escenario en un feudo de la Edad Media.

En Perú, algunos representantes de la academia están atravesando un proceso de tránsito desde las orillas de la izquierda socialista con devaneos autoritarios a posiciones más “socialdemócratas”. Un caso reciente es el de Gonzalo Portocarrero, quién en un reciente artículo en “El Comercio” argumentó que “el socialismo ha fracasado”, refiriéndose a lo que nosotros llamamos el socialismo autoritario. Desde la posición de la Democracia Social celebramos que la verdad histórica vaya abriéndose paso, a pesar del histórico escepticismo de muchos y los gritos e insultos de otros. Finalmente el curso de la historia demuestra que las dictaduras sólo traen atraso económico, destrucción de las instituciones e ignominia. El mundo es consciente de ello y el continente parece empezar a despertar a esa verdad. Lamentablemente aún quedan fundamentalistas.


EL pueblo Venezolano atraviesa una dura prueba que le impone la historia, una lucha que dada las circunstancias puede ser larga y muy dolorosa. El movimiento estudiantil se ha puesto de pie y ha asumido el combate contra la brutal autocracia del heredero de Chávez. El régimen está llevando a la ruina al país, hay desabastecimiento, inflación, crimen organizado, grupos paramilitares armados por el régimen,  etc. Empieza a popularizarse un sentido común referido a que el final del Gobierno de Maduro se acerca. Éste sin embargo resiste, se aferra, reprime, asesina y miente a la comunidad internacional; engaños que no prosperan por la velocidad de la información que se trasmite por redes sociales, velocidad que no deja chance al gobierno para censurar ni manipular.

En medio de la lucha dos personalidades de formas distintas lideran a la resistencia. De un lado Leopoldo López, en la clandestinidad aboga por llamar al pueblo a las calles y derrocar al tirano de una vez y sin dilaciones. Desde su delicada posición ha convocado a una movilización para el martes, en donde anuncia que el mismo estará presente. Sin duda su valentía y arrojo es destacable, habrá que evaluar si el camino de la salida inmediata de Maduro es transitable o sólo desangrará más al país.

En la misma orilla de lucha, pero con otro estilo Henrique Capriles, el candidato de la oposición unida en el último proceso electoral, en alguna dimensión con mayor fe en la salida institucional, lo que no es seguro es si en la Venezuela de Maduro aún ha quedado en pie alguna institución o si 15 años de Chavismo lo ha devastado todo. Capriles ha salido a pedir un alto a la violencia y una estrategia más realista de lucha con el chavismo encarnado ahora en Nicolás Maduro, Capriles anuncia también una marcha convocada por el en contra de la violencia y por la solución de los problemas del país. Lo queda claro es que la unidad es la única real salida para enfrentar a la represión del régimen; cuya caída está próxima a juzgar por la violencia empleada; cuando una dictadura emplea más la fuerza es cuando menos segura se siente de contar con respaldo popular.

Todo lo hecho y dicho por el gobierno de Maduro califica para expresar el más profundo rechazo y sumarse a la causa de libertad del Pueblo venezolano en todos los rincones del orbe. Lo curioso y al mismo tiempo indignante es observar en Perú el silencio cómplice de algunos políticos, referentes de la academia, activistas de Derechos Humanos, etc. herederos de esa vieja izquierda que va de retirada, abatida por la modernidad y la indiferencia electoral del pueblo. Ni un pronunciamiento, ni un volante, ni una declaración de condena. Los fundamentalistas se niegan a ver la realidad.

De tratarse de un dictador de derecha ya los tuviéramos organizando vigilias, debates y haciendo firmar manifiestos; ahora en cambio por tratarse de un aliado ideológico guardan silencio y justifican su apatía con argumentos febriles. Esta es sin duda una actitud que puede definirse como “hemiplejia moral”; sólo les funciona un hemisferio de su ética, el que condena a los que no piensan como ellos. Para los suyos todo vale en nombre de un manual importado que ha mostrado fracasar allí donde se ha aplicado.

Esto configura sin duda una señal ineludible de la crisis terminal del izquierdismo de corte autoritario, ya no les queda ni la razón histórica, ni los planteamientos de futuro, ni las ciencias sociales y ahora tampoco esa falsa moralina que trataban de esgrimir como principal argumento. Aquellos que no deslindan de un sátrapa que condena a su pueblo o a un pueblo hermano al hambre y al drama de la sangre no tienen ninguna autoridad moral. Deben sin duda revisar su escala de valores y la construcción de sus conceptos. Deben abandonar el fundamentalismo ideológico y el enamoramiento de las ideas que los empuja a no mirar con detenimiento la realidad.

Rómulo Betancourt estuvo en sus años mozos en Perú realizando labores de propaganda junto a la juventud del APRA, Bolívar, valiente venezolano fue libertador de nuestra tierra; nuestros lazos con el pueblo de Venezuela son fraternos, sinceros e intensos, es por ello que desde la Democracia Social, les expresamos nuestra solidaridad en este momento de lucha, nuestra fe en que pronto caerá el tirano y podrán redefinir sus destinos hacia la libertad y el progreso.

Viva Indoamérica libre!

Enrique Valderrama

lunes, 17 de febrero de 2014

Doble contra sencillo. Por Agustín Haya de la Torre

Como quien aprovecha el impacto del fallo de La Haya, el gobierno de Ollanta Humala decidió duplicar el sueldo a los ministros y altos funcionarios de confianza. Volvemos de pronto al jolgorio de los altos montos que ganaba una pequeñísima élite de amigos en los gobiernos de Alberto Fujimori y Alejandro Toledo. Como en un remake, escuchamos los viejos argumentos acerca de la inevitable necesidad de equiparar los ingresos de los altos cargos públicos con los del sector privado.
El argumento suena y resuena al punto que los gerentes del sector privado creen que a fin de mes les pagarán los 90 mil soles mensuales que en promedio, según acuciosos investigadores, dicen que ganan. Cuando los altos funcionarios de las transnacionales, todos con postgrados en administración y una colección de diplomas, cobren sus cheques, constatarán apenados que no pasan de quince o veinte mil soles, en el mejor de los casos.

No nos referimos a los gerentes de la abrumadora mayoría de empresas nativas, a los cuales los sueldos de algunas sucursales extranjeras les produce vértigo. Resultaría muy interesante que la Confiep o la Sociedad de Industrias nos alcancen algún estudio “sincerado” sobre el porcentaje de gerentes peruanos que ganan dicha suma, tomada como referencia para que el gobierno diga que los 30 mil soles que va a pagar todavía están muy lejos del promedio privado.

El mito que el sector privado construye de sí mismo linda con la comicidad. Sesudos comentaristas de casi todos los medios repiten como disco rayado el dato de las decenas de miles de dólares que ganan los gerentes en dicho sector, cuando les bastaría preguntar en las empresas donde concurren quiénes ganan más que un ministro.




Ciertamente que unos cuantos funcionarios, sobre todo extranjeros, alcanzan tan excepcional suma, pero resulta una tomadura de pelo que nos engañen al asegurar que existe una masa de mandos privados que multiplican el sueldo público más elevado,

Prueba irrefutable es la larguísima cola de peticionarios de un puesto estatal, incluso por cierto durante el malvado límite de 15 mil soles que puso el populista García. Vaya escándalo que armaba cualquier toledista de confianza cuando se le insinuaba que su gobierno ya había terminado y que no tenía que sacrificarse por la mitad del sueldo con los malévolos compañeros. Vueltos a la dura realidad, la demagógica reducción aprista les sonaba a música celestial. 

Todos queremos que el Estado pague mejor. O sea que los maestros, los médicos, los policías, los empleados estatales, ganen lo adecuado. Que se necesitan jefes calificados y que exista una jerarquía salarial, no puede ponerse en duda. La injusticia aparece intolerable cuando no hay proporción y la distancia entre los que más ganan y el promedio se ahonda, o cuando la diferencia con el salario mínimo es ahora de 40 veces y encima el puesto mejor pagado depende del favor político.



domingo, 16 de febrero de 2014

La tragedia venezolana y el silencio cómplice de Humala

Por: Víctor Raúl Trujillo de Zela
        Jaicec Espinosa Sandoval


El quinto no matar, dicta uno de los mandamientos de Dios, que no solo es ley en el mundo cristiano, sino que también lo es en el resto de religiones del mundo, pues más allá de ideologías, es la vida la que siempre debe ser protegida. Hacemos hincapié en esta cita porque la dictadura Chavista ahora liderada por Nicolás Maduro, ha desencadenado una brutal agresión contra los jóvenes que protestan por la gravísima situación económica y la falta absoluta de libertades en la Venezuela actual. Lamentablemente, ante esta barbarie, el presidente Humala ha preferido irse al Medio Oriente y lo que es peor, no pronunciarse en contra de la criminal represión llevada a cabo por el dictador venezolano, revelando que el cordón umbilical entre el humalismo y el chavismo existe, recordando ahora más que nunca, que Ollanta Humala declaró públicamente que el “Socialismo del siglo XXI”, que azota a Venezuela, era el camino a seguir.

Por ello aplaudimos y concordamos plenamente con lo expresado por el expresidente Alan García, respecto a este acuciante tema, que involucra a todo el continente americano, y que ha sentenciado que: “El gobierno chavista ha llevado su país a la miseria, al desempleo y la violencia. Ahora es el régimen del crimen y la represión”. Lo que ha sido respaldado por su partido, el Partido del Pueblo, que mediante un comunicado también ha expresado que: “Demandamos del gobierno del Perú, un enérgico pronunciamiento de defensa del orden democrático, los derechos humanos y la libertad de expresión, trasgredidos por el gobierno venezolano”. 

Así, el líder del Partido del Pueblo, se levanta nuevamente como el líder de la democracia en América Latina, pues fue el primer líder político en criticar la reunión de la CELAC en Cuba sentenciando que: “Es trágico que 30 gobernantes elegidos reciban lecciones de una dictadura de 55 años que tiene al pueblo en la miseria”.

Por ello saludamos que la presidente electa de Chile, Michelle Bachelet, a pesar de ser una ferviente admiradora del dictador cubano Fidel Castro, se haya pronunciado conminado a la dictadura venezolana a convocar a un plebiscito para poner al voto la continuidad del régimen chavista; sería importantísimo también que haga el mismo pedido a la dictadura de los hermanos Castro, que llevan más de 55 años sometiendo al pueblo cubano.


Y el presidente Humala no solamente ha guardado un silencio cómplice en este tema, sino que también ha demostrado su insensatez política al permitir el abusivo aumento de sueldo a sus ministros y a los principales funcionarios del gobierno nombrados a dedo. Lo que se agrava más porque hace unos meses, a raíz del aumento de sueldo del contralor de la república, Humala afirmó que el aumento era escandaloso y que obviamente no estaba en la agenda de su gobierno ningún tipo de aumento. A los pocos meses y entre gallos y medianoche, el gobierno suelta el decreto supremo permitiendo el inmoral aumento, una vez más Humala contra Humala.

sábado, 15 de febrero de 2014

¿Qué es ser aprista? Por Hernán Hurtado

Hoy los jóvenes apristas son mucho más que una reserva moral
Hoy los jóvenes apristas
son mucho más que una reserva moral
¿Qué es ser aprista? Por Hernán Hurtado

El aprismo no solamente tiene que transmitirse, tiene que transformarse a razón que el mundo cambia y las necesidades del hombre se complejizan. Esto es, debemos hacer algo más que evocar glorias históricas, debemos evolucionar, ser esencialmente dialécticos de cara al futuro.

¿Qué es ser aprista? ¿Qué se entiende por ser militante aprista, qué significa pertenecer al partido? Y no me refiero a cualquier partido, sino al Partido Aprista. Se podría dar muchas respuestas y vueltas sobre el tema sin llegar a una respuesta contundente.Incluso desde el mismo Víctor Raúl Haya de la Torre no hay una rígida categorización del militante y es que desde la condición [concepción] del frente único se invita y convoca a los hombres con vocación de servicio y afines al antimperialismo constructivo. En un análisis histórico se podría afirmar que el militante se convierte desde un punto emocional, como el reencuentro de una identidad popular añorada en el imaginario ancestral, como sí el aprismo hubiese existido desde siempre.

Por esto, la pregunta ¿Qué es ser aprista? no permite una automática respuesta, tampoco una verdad única aceptada por todos los apristas, ya que para ello se exigiría que todos guarden un rasgo común. No existe un"aprista-tipo", no hay rasgos comunes que permitan dejar arbitrariamente a ningún aprista fuera de esta definición. Y como esto es naturalmente imposible, del mismo lo es dar una respuesta totalmente objetiva y mucho menos aseverativa. Cada respuesta obedece a una definición. Y las definiciones deben obedecer a la realidad sin caer en juicios parciales,como esto es relativo, las respuestas muchas veces evidencian subjetividades y atributos personalistas. Ninguna respuesta es satisfactoria, en consecuencia todo aprista hace el ejercicio propio de saber definirse dentro de un marco axiomático.

"Ser aprista” es hacerse partícipe del destino histórico común de la justicia social, compartiendo los valores democráticos, ejerciendo la docencia política, cultivando e interpretando la doctrina, conociendo la historia, modernizando el quehacer político.

Fe, unión, disciplina y acción son formas y valores apristas de aproximarse al ideal, son normas para mejorar como apristas y contribuir al perfeccionamiento democrático. Lo vital y reales que esto se materialice en la conducta, practicar y realizar el aprismo desde cualquier esfera de interacción. De aquí que tiene un efecto social positivo que es el convocar a los demás por añadidura.

El aprismo posee una gran significación humana que trasciende su contenido ideológico ya que como defensor de la libertad, soberanía popular, de los derechos humanos y del estado de derecho, es un llamamiento a la emancipación y reivindicación histórica de los pueblos, reconoce el derecho de todos los pueblos a su libertad, afirma la justicia social y es cátedra viva y efectiva respuesta a formas opresoras y dictatoriales, con la intensificación e historia de militantes y líderes en principios y valores.

Los odios ab-zurdos. Por Renzo García

Los odios ab-zurdos. Por Renzo García

El APRA como siempre salió a las Calles, pero antes de la protesta, la Izquierda “AB-ZURDA” e intolerante rechazaba a través de las redes sociales la participación del Partido del Pueblo en la Plaza San Martín, rechazaba nuestra participación legitima como ciudadanos peruanos en una protesta que encarnaba la indignación popular por el incremento de los sueldos a los Ministros.


La protesta no era de un partido, la protesta era del Perú. La protesta no era contra el APRA era contra “Palacio”.

Sin embargo, una vez más, los ODIOS y ENCONOS de los “AB-ZURDOS” desnaturalizaron la protesta, discriminando a un grupo de peruanos por pensar diferentes a ellos, en una actitud “AB-ZURDAMENTE” intolerante.

¿Por qué nos odian tanto, si el APRA no los odia? ¿Por qué siembran tanta intolerancia?

Mientras ellos, aquí en Perú, rechazaban la participación del APRA en una legitima protesta popular contra el partido que ellos mismos llevaron a palacio, en Venezuela el Gobierno de Maduro reprimía y asesinaba a estudiantes. ¿Dónde estuvo la izquierda Peruana? ¿Cuál ha sido su nota de protesta? ¿Dónde están los defensores de los Derechos Humanos?.

El APRA como siempre, estuvo en la embajada de Venezuela acompañado a nuestros hermanos venezolanos y no vimos a ningún militante de izquierda. Me vuelvo a preguntar ¿Por qué nos odian? 

Pero vamos…Los que estamos en política, sabemos bien de lo que se trata, sabemos en el fondo - aunque algunos no conozcan definiciones exactas- de qué se trata la política. Es una sensación extraordinaria. 

Y el que hace política desde un partido como el APRA, sabe que la historia del APRA no solo está en los libros de Haya, sabe que nuestra historia es una historia viva de 90 años ininterrumpidos de actividad política en el país (desde 1930) vivió y vive en la memoria colectiva de nuestros bisabuelos, abuelos, padres y ahora o después en nuestros hijos, en la memoria del peruano común de a pié, del peruano clasemediero, del peruano comerciante, del peruano minero o petrolero, del peruano pobre. El APRA se encuentra en la memoria histórica colectiva de todos y cada uno de los peruanos, porque el APRA jamás fue un partido de clases; fuimos, somos y seremos siempre un frente único, seremos siempre EL PARTIDO DEL PUEBLO, representando a todos los peruanos sin excepción y sin discriminación ideológica.

Y me vuelvo a preguntar ¿porque nos odian?

90 años de historia no pasan en vano. El APRA ha sembrado alegrías, prisiones, destierros, convicciones, luchas, muertes, vidas, gratitudes y pasiones. A cambio hemos cosechado simpatía y en otros ODIO. 

Gracias a Dios y a la historia, todo queda registrado en las páginas de la vida y memoria del Perú. 

El APRA gobierna desde la consciencia popular. En 1931, Haya de la Torre pronunció un discurso: 

(…) Quienes han creído que la única misión del aprismo era llegar a Palacio están equivocados. A Palacio llega cualquiera, porque el camino de Palacio se compra con oro o se conquista con fusiles. Pero la misión del aprismo era llegar a la conciencia del pueblo antes que llegar a Palacio. Y a la consciencia del pueblo no se llega ni con oro ni con fusiles. A la consciencia del pueblo se llega, como hemos llegado nosotros, con la luz de una doctrina, con el profundo amor a una causa de justicia, con el ejemplo glorioso del sacrificio... Solo cuando se llega al pueblo se gobierna: desde abajo o desde arriba! Y el aprismo ha arraigado en la consciencia del pueblo. Por eso, mientras los que conquistaron el mando con el oro o con el fusil, crean mandar desde Palacio, nosotros continuaremos gobernando desde el pueblo (…) 

Y me vuelvo a preguntar ¿porque nos ODIAN?


El APRA, el PPC y Secada. Por Renzo Ibáñez

Tengo un especial cariño por mis amigos del PPC, en especial por los más jóvenes, los de mi
promoción. Veo, desde mi militancia aprista, con profundo respeto su organización, fundamentalmente por lo que representan como partido político  para la institucionalidad democrática en un país con muy pocas organizaciones que la sostengan y cuyo destino ha estado marcado por el autoritarismo y los odios políticos. Admiro  al más viejo de sus militantes, fundador y  líder histórico, Luis Bedoya Reyes, quien con inusitada grandeza nos dio a todos los peruanos una lección de decencia y desprendimiento al rechazar la Presidencia de la Constituyente de 1978-1979 en favor de quien se lo merecía por legitimidad y cantidad de votos, a Víctor Raúl Haya de la Torre. El Tucán, de esa forma, le negó el paso a la histórica mezquindad que ya tanto daño nos había hecho. Con ese preámbulo se aprobó una constitución que recogió modernidad, sensibilidad y muchos derechos civiles y sociales. Nos pusimos de acuerdo.

Digo esto porque he visto extrañado el innecesario ataque del precandidato ppcista a la Alcaldía de Lima, Pablo Secada, contra lo que él denomina "Trilogía del Mal", dentro del cual ha ubicado a Alan García (asumo que para él, el APRA sería la "Estrella de la Muerte") y otros dos personajes a los que no me compete defenderlos ni siquiera nombrarlos. Ellos, según el mencionado personaje, pretenderían cerrarle el paso a su "decente y renovadora" candidatura. Por supuesto, toda esta fantasía construida con un prejuicioso antiaprismo, un ego antipatiquísimo, prepotente soberbia y la pendejada de pelearse con un enemigo grande para ponderarse electoral y políticamente, en definitiva, colgarse del saco de García. Ya lo hemos visto tantas veces en la historia. Además, impulsado por un intento desesperado por defenderse de la más terrible acusación que pueda tener un hombre, el maltrato a una mujer.


Secada, ha quebrantado toda una tradición política de buen y respetuoso contendor como la que el PPC había demostrado aún dentro del fragor de la batalla política, donde uno suele  decirse literalmente de todo. No solo pareciera haberse impregnado del formato antiaprista de sus ex-aliados electorales en el último proceso de revocatoria, sino que con tanta falta de ubicuidad se atrevió a disparar duras críticas sobre la gestión interna de mi partido y  aderezó sus prejuicios argumentando que los libros de historia estaban plagados de actitudes como las que denunciaba, aludiendo directamente a los 90 años de historia del APRA. Es una lástima comprobar que la representación de la renovación ppcista no ha pasado de ser un hombre con fluidez de cifras, ya que, o no ha leído los libros que dice haber leído o simplemente no ha procesado y entendido la historia como un proceso más complejo si no como un anecdotario de valoraciones parcializadas. Se abrió un frente de manera tonta e inútil.   

Por último, su militancia relativamente nueva podría explicar algunas de estas actitudes, aunque no las denuncias por maltrato contra su esposa. Los últimos descargos de ella solo han podido hacer difusa la comprensión del tema pero no salvarlo de las naturales suspicacias en un momento en que la gente está más consciente de la lacra que representa la violencia contra la mujer. Un feminicidio a la semana en la capital  no es poca cosa. Tal vez por ello me da bronca que haya usado a un emblema, con virtudes y defectos,  de la política nacional como es el APRA,  para eludir las explicaciones que su militancia y la ciudadanía esperan. Así, dicha actitud ha generado divisiones y encontrones en el Partido del mapa. Erráticos de un lado y desaforados de otro han mostrado una mueca que el PPC no nos acostumbra a dar. Espero todo mejore por el bien de la democracia nacional.

viernes, 14 de febrero de 2014

Juventud por la Democracia - No al aumento a ministros


*Comunicado del colectivo Juventud por la Democracia

El Decreto Supremo 023-2014 promulgado hace algunos días con la intención de doblar el sueldo a los ministros, viceministros y otro personal de confianza del gobierno demanda la más enérgica reacción de todos los peruanos que creen en la proporcionalidad y la posibilidad de un mejor gobierno. Los que defienden esta medida argumentan que los tecnócratas calificados deben ser bien remunerados, pero no mencionan – tal vez por conveniencia- que la remuneración establecida desde el 2006 está a la par con la de otros países latinoamericanos similares al Perú, y que existe un mecanismo legal por el cual algunos funcionarios muy especializados pueden acceder a mejores remuneraciones.

Algunos medios de comunicación han llegado a afirmar que la medida de reducción de sueldos fue demagógica y ha provocado una “fuga de talentos” de la administración pública. Esto es mentira, prueba de ello es que en los últimos años profesionales de alto nivel del Banco Interamericano de Desarrollo y del Fondo Monetario Internacional han trabajado en el Estado; hasta el momento ni el ministro de economía y muchísimo menos el presidente de la República han podido demostrar que haya “fuga de talentos”, más da la impresión que la falta de talentos en el actual gobierno es debido a su falta de operadores políticos y conocimiento del Estado. En todo caso, deben responder por que los actuales operadores del gobierno aceptaron sus puestos si es que no pueden vivir con su sueldos.


El universo de peruanos que ganan más de 15 mil soles mensuales es extremadamente reducido, correspondiéndole a funcionarios de alto nivel de algunas multinacionales o empresas extractivas. Como en toda sociedad de mercado, es un insulto pensar que un funcionario puesto a dedo por el gobierno debe ganar lo mismo que los máximos millonarios del país.


Así, debemos dirigirnos a todos los peruanos de a pie para exigir la derogación de este Decreto Supremo, rechazando así un nuevo intento de consolidar un proyecto personal del presidente, quien quiere tener contentos a una serie de funcionarios que hasta hoy no han demostrado ningún resultado, sin mayores resultados de desarrollo en educación, salud o reducción de la pobreza. Así como debemos ser implacables en imponer la meritocracia entre los funcionarios de carrera en el Estado, debemos ser doblemente exigentes con los funcionarios nombrados a dedo, en especial con el peligro de un proyecto reeleccionista acechándonos. 

LAS TAREAS PENDIENTES – RENOVACIÓN Y REESTRUCTURACIÓN “EL APRA NUNCA MUERE”

Por: Ricardo Yturbe López

Los actos de violencia e intolerancia, en el platón de ayer, llevado a cabo en la Plaza San Martín, perpetrados por los autodenominados “indignados”, que no son más que miembros de los partidos y grupúsculos de partidos comunistas, socialistas, casi comunistas, casi socialistas, y más facciones, nos deja dos lecciones importantes:

1.       Tenemos una izquierda intolerante, odiadora e histérica que no cambiará. Esos odios antiapristas son transmitidos, en muchos casos, de manera umbilical, y en otros por presión social y hasta laboral. Lo visto ayer era una serie de grupúsculos de todas las tonalidades marxistas y maoístas, sin orden, sin norte, sin discurso común y sin más programa en común que su visceral antiaprismo. Y es que verlos saltar y dar alaridos mientras quemaban una bandera del APRA, era como ver una película ambientada en el mesolítico.

Sin lugar a dudas, es necesaria la presencia de la izquierda en el país que represente su agenda y programa, y que enriquezca el debate en el sistema democrático de nuestro país. Pero es imperativo que la izquierda deslinde con estos movimientos violentistas e incoherentes, que reclaman con voz en cuello su derecho a expresarse, pero que corretean con fuego a los apristas. O que reclaman por los derechos humanos de algunos, pero que mantienen un silencio cómplice la muerte de tres jóvenes en las protestas en Venezuela, en contra de un régimen fascista, como el de Nicolás Maduro.




2.    El Partido Aprista Peruano, como institución, carga los lastres de actos cometidos por algunos militantes, ex militantes, cuando han sido hechos personales, en los que el APRA jamás se benefició, sino aquellos que delinquieron para saciar un apetito personal. Pero la existencia de comunidad política (y el APRA es la única que cuenta con ella), hace que la etiqueta la carguen, inclusive, muchachos de 17 años que recién empiezan a vivir, se les llega a acusar por hechos, que sucedieron cuando ni estaban en proyecto natal.

Pero esto no sucede con las demás fuerzas políticas, por ejemplo cuando hablamos del tema ECOTEVA, sólo se le acusa a Toledo, y no a Perú Posible; cuando se hace referencia a la cena de Chehade con mandos policiales en el “Brujas de Cachiche”, sólo se toca a el ex vicepresidente, y no al Partido Nacionalista; del mismo modo podemos hablar del caso COMUNICORE, sólo se trataba de Castañeda, y no de Solidaridad Nacional.

Esa existencia de “comunidad política” en el APRA, que le hace compartir aciertos desaciertos, rasgos y sentidos comunes, la pone en obligación de tomar acciones que involucre a toda su organización y militancia a fin de borrar esas etiquetas de “corruptos” “faenones” “Petroaudios”, etc. Ello implica dar paso a una nueva generación de militantes, preparados en el campo político y profesional, para que refresquen la imagen del Partido, rescatando a los buenos cuadros. No se trata de una fumigación, sino de una limpieza y  orden de la casa.

La política nacional ya ha presentado nuevos rostros a la sociedad, una muestra de ello fue el proceso de revocatoria del año pasado, donde vimos cuadros que refrescaron el escenario político, pero el Partido Aprista Peruano, insistía en presentar a los mismo rostros, nadie duda que lo hicieron con gran altura, pero considero que se perdió la oportunidad de presentar, por lo menos un par de rostros como aporte a esta nueva ola de políticos peruanos.

El Partido Aprista está en la obligación de reestructurar su organización, de tal manera que responda a las necesidades de una sociedad que cada día piensa menos en militar en un partido político, que siente que no necesita de éstos para satisfacer sus demandas, ni canalizar su mensaje, por qué cuenta con las redes sociales que le permite al ciudadano decirle directamente lo que se le ocurre a sus autoridades. Debe aprovechar la mística que ha caracterizado y mostrarse como un grupo humano con alma, el cual sea visto por el ciudadano como alguien parecido a él.

Por ello, es necesaria una reingeniería orgánica y de cuadros, que permitan al APRA reenganchar con la sociedad, no como el partido de masas, que ello no funciona ahora, pero sí como un instrumento de transformación social y de atención efectivas de demandas.


miércoles, 12 de febrero de 2014

Av. La Colmena vs. Av. Nicolás de Piérola. Hernán Hurtado Castro


Av. La Colmena vs. Av. Nicolás de Piérola

¿Colmena o Piérola? ¿Por qué Colmena y no Piérola?

Escribe: Hernán Hurtado Castro

Una nota para intentar esclarecer la historia de la toponimia urbana de la avenida La Colmena sobre el nombre oficial de la avenida Nicolás de Piérola.


A menudo los que transitan o recorren el Perú suelen afrontar ciertos retos de confusión en cuanto a las voces designadas a ciertos lugares. Si queremos ser exagerados, podemos encontrar en los primeros cronistas, por ejemplo en Cieza de León y sus menciones a la los ríos y áreas adyacentes, casos de toponimia que pueden desorientar a quien no esté familiarizado con las voces originales o la tradición establecida. Así nuestra Lima por herencia y extensión suele calificar las calles a merced de la mejor usanza. Este es el caso de la otrora emblemática y elegantísima Av. Nicolás de Piérola que ostenta en el imaginario limeño el título de La Colmena. Así es, todos le llamamos La Colmena y nos entercamos hasta cuando señalamos direcciones al indicar entre paréntesis “Ex Av. La Colmena”. La Colmena ha encimado a Nicolás de Piérola.

Lámina 2: En la comparación de Planos se distingue el flujo de circulación que significó La Colmena/Nicolás de Piérola frente a los entrampados corredores de los jirones adyacentes. Planos tomados de Andrés Herrera (2003).

Para La Lima urbana, mejor dicho para los limeños de ayer y siempre, resulta imperativo adornar de voces propias ciertas calles, de rebautizar cada espacio que se pueda. Quizás en actitud rebelde a lo establecido o por hechos trascendentales que marcaron nombres populares para cada calle, es el discurrir típico de muchas toponimias. Es válido suponer que la mayoría de antiguos nombres de calles fueron atribuidos por apellidos notables, orden o convento cercano, o sencillamente por el nombre de automática referencia a la calle, por ejemplo  la Calle Siete Jeringas (Jr. Paruro con Jr. Huanta) respondía al oficio de un curandero negro  que trataba a sus pacientes con enemas por siete días.

Existen muchos sitios, -sean calles, plazas, ex haciendas, avenidas…  como  la Av. Garcilaso de la Vega  que se le sigue llamando Wilson- que resisten al cambio de nombre, mejor dicho al uso del nombre y este es el caso de la Av Nicolás de Piérola, conocida como Av. La Colmena. Veamos este caso.

Piérola y La Colmena

En 1898 el presidente José Nicolás Baltazar Fernández de Piérola y Villena  (n. Arequipa, Perú, 5 de enero de 1839 - m. Lima, 23 de junio de 1913), o sencillamente “El Califa” Piérola, inició una de las primeras reformas urbanas de mayor trascendencia mediante el nuevo ministerio de Fomento dirigido por Eduardo López de Romaña, esto es,  se empezaron los trazos de las grandes avenidas o corredores para mitigar el congestionamiento –mal que padecen todas las urbes de todos los tiempos- de coches, carrozas y abrir nuevas rutas para el ferrocarril, como el caso de la avenida Brasil que unía El cercado con Magdalena o el aristocrático Paseo Colón siguiendo el diseño que exhibía la bonaerense Av de Mayo.

El proyecto urbano terminó por desmantelar las virreinales murallas y portadas del Cercado de Lima y era imperativo articular Lima con el Callao con varios corredores que permitan un flujo diferente de tránsito y comercio y unir ese antiguo camino colonial de Lima y Callao, hoy nombrado Av. Oscar R. Benavides (pero le siguen llamando Colonial). Este proyecto sería la avenida La Colmena -¿Por qué “Colmena”? 1. porque esta era la firma del Consorcio que iba a ejecutar la obra o 2. Porque cerca a los Huérfanos existían comerciantes de miel y fueron los principales opositores, luego a dicho proyecto le quedaría el mote-  que fue estancado por el problema con el financiamiento (política de Piérola de no querer endeudarse más de lo que preveía que podía pagar) y por el rechazo de los vecinos que iban a ser trasladados a las afueras de Lima. Recordemos que la periferia de esa Lima estaba compuesta por extensas haciendas conectadas por caminos carrosables, tranvías y canales. Este proyecto durmió el sueño de los justos por más de 22 años.


Leguía y La Colmena

Desde 1919, con Augusto Bernardino Leguía Salcedo (Lambayeque, 19 de febrero de 1863 - Callao, 6 de febrero de 1932) de gobernante, se emprendieron proyectos para recibir el centenario de la independencia (1921) con una Lima de cara moderna y atractiva, de avenidas y edificios al estilo inglés. Parte esto fueron la Av. Alfonso Ugarte con jardines y árboles entre los carriles y la Av. Leguía que hoy conocemos como Av. Arequipa. Orrego (2004) señala que “durante los años de la República Aristocrática, la apertura de la avenida La Colmena y del Paseo Colón y la construcción de la Plaza Bolognesi habían sido de escasa utilidad, ya que los problemas de hacinamiento y escasez de vivienda continuaban” sin embargo esto no impidió el rápido apogeo de los comercios y distintivas casas en las nuevas avenidas que significaban cierto suspiro de modernidad. Esta ambiciosa avenida en homenaje a Nicolás de Piérola, viejo rival de Leguía quien tuvo el gesto de dedicarle tal obra, fue realizada por la firma “La Colmena” y consistía en unir Grau hasta Plaza Dos de Mayo (Ver plano comparativo entre Lima de 1908 y Lima de 1948 y el sentido urbano de la avenida en mención), inicialmente se entregó el tramo de Plaza Dos de Mayo hasta Av. Abancay con el glamour de edificios con arreglos al estilo Art Nouveau y una escultural Plaza en homenaje al libertado José de San Martín que fue certamen de atracción mundial con embajadores de diversos países, con toda la plana de ministros, notables, autoridades e intelectuales adictos al régimen de aquel entonces.


Lámina 4: Inauguración de Plaza San Martín el 28 de julio de 1921 con motivo del centenario de la Independencia. Fuente: Antiguas calles de Lima (2003).

El monumento al General San Martín es hechura del reconocido escultor Mariano Benlluire y Gil, quien no conoció el Perú hasta el develamiento de su coloso de 17 metros de altura, un exquisito trabajo de cuatro años (Herrera Cornejo, 2003)

La Colmena/Nicolás de Piérola y las lanchas

Las hasta hace poco conocidas como Lanchas tienen origen por los años 50’s cuando se importaron Chevrolet’s gasolineros para renovar el parque automotriz y rápidamente se volcaron al servicio de expresos o carreras colectivas que estaban a cargo de la otrora Federación de Choferes con ruta desde Plaza San Martín (exactamente cerca a la puerta del hotel Bolívar) hasta el Callao,  hasta Sáenz Pena con Dos de Mayo de donde daban vuelta hacia Lima, en resumen, las lanchas nunca tuvieron paradero.
Lámina 5: Avenida La Colmena/Nicolás de Piérola en 1970. Los Carteles de los comercios de entonces y los Chevrolet Bel-Air y Sedan de 1952 y 1954 respectivamente. Al lado derecho un Volkswagen Escarabajo “volocho” rojo que por el diseño posterior parece de 1960. Así se condimentaba el paisaje visual de toda la avenida.

Casi en los 80’s aparecieron en la escena los Dodge, -esos que hasta ahora sobreviven y transitan toda La Colonial-, de motor petrolero y mucho más rendidor que el Chevrolet. Las lanchas ampliaron su recorrido hasta el Parque Universitario y luego al Jr. Paruro. La Federación de Choferes prosiguió hasta los 90’s con la tutela del rubro hasta su desaparición.

La Colmena hoy
La quincha y el adobe padecen ante la mirada indiferente de las autoridades de turno.

Más allá de una avenida pensada para la Lima aristocrática hoy adolece por el abandono generalizado al patrimonio arquitectónico del Damero de Pizarro. Existen iniciativas por conservar y curar solares, balcones y templos, sin embargo esto no es suficiente. En otras ciudades del continente que poseen menor baluarte histórico en sus capitales le dan mayor presupuesto e interés a  “centros históricos” como el caso de Santiago, Buenos Aires, México y Panamá. Se debe también iniciar las puestas en valor de algunas casonas simbólicas en custodia de la Beneficencia de Lima. Hace un año presentaron la propuesta de convertir a La Colmena/Nicolás de Piérola en otro paseo peatonal al estilo del Jirón de la Unión (Espejo 2011) esto mitigaría la confluencia de indigentes, microcomercialización de narcóticos, negocios informales, delincuencia común y prostitución para bien de los vecinos, el comercio de la zona, los limeños y en general para todos los visitantes de este pedacito del Cercado, patrimonio de la humanidad.

Bibliografía

HERRERA CORNEJO, Andrés
2003      Antiguas calles de Lima, orígenes de los nombres. Tomo I. Ediciones Novecientos Seis. Lima.

ESPEJO, Karen
2011      La agonía de la Colmena. En La República 16 de enero de 2011. Lima

ORREGO PENAGO, Juan Luis
2004 La avenida Leguía (hoy Arequipa) en Blog de Juan Luis Orrego Penagos http://blog.pucp.edu.pe/item/128940/la-avenida-leguia-hoy-arequipa

domingo, 9 de febrero de 2014

¿Que es Somos Perú? Por Luis Zaldívar

La renuncia de varios militantes de Somos Perú para formar una nueva agrupación, entre quienes figuran la esposa del fundador Alberto Andrade y los alcaldes de Ate y El Rímac[1], nos dan una oportunidad para analizar a este exitoso movimiento político surgido en 1995 y los alcances de lo que su fundador llamó un “partido municipalista”[2], un estilo que en cierta manera se ha impuesto con la proliferación de movimientos regionales y municipales en la última década.

Somos Perú nació, fundamentalmente, como una escisión del PPC encabezada por Alberto Andrade, quien tenía la extraña combinación de ser alcalde de Miraflores y tener un trato llano que lo identificó rápidamente con el criollismo limeño. Su carisma y habilidad de desmarcarse de los partidos tradicionales en tiempos de ensañamiento de la dictadura contra ellos hizo que Somos Lima –el nombre original que ahora quiere ser retomado por la escisión liderada por la esposa de Andrade- gane la alcaldía limeña en 1995 con poco menos de un millón y medio de votos[3] y luego la reelección en 1998 con unos 300 mil votos más que en la elección anterior[4]. En los siguientes años tomaron el nombre de Somos Perú para tentar la presidencia, pero poco pudo hacer el joven movimiento frente a la maquinaria política de la dictadura fujimorista, luego perdiendo la alcaldía en el 2002 frente a Luis Castañeda Lossio, quien ganó ampliamente en las zonas populares más identificadas con la nueva Lima provinciana.
  
Sin embargo, el mérito de Somos Perú en los 14 años después de esa elección ha sido el de mantener se activo y lograr mantenerse en el escenario sobreviviendo a su fundador. El año 2002 Andrade pierde Lima, pero Somos Perú logra 17 distritos y una cantidad importante de regidores [5]; esto debido en gran parte a la resurgencia de los partidos políticos –PPC con Unidad Nacional y el APRA-. En el año 2006 forman parte del Frente de Centro que se aglutinó alrededor de la postulación de Valentín Paniagua, logrando mantener un porcentaje similar de alcaldías y provincias. Sin embargo el año 2010, ya con Alberto Andrade fallecido y bajo el liderazgo de su hermano Fernando, logran una mejor tranza al aliarse con Perú Posible y Acción Popular, ganando para sí las provincias de Ancash, Pasco, Huánuco, Cusco y Moquegua. Con gran habilidad y sin tener figuras presidenciables, Somos Perú se ha posicionado como un aliado útil en las elecciones generales y un fuerte competidor en elecciones municipales en gran parte del país.


Como otras agrupaciones fundadas en los noventas, Somos Perú no tiene mayor ideario que el de respetar las formas democráticas, intentando diferenciarse más bien por el énfasis municipal[6]. Tampoco existe un consenso de propuestas macro que el partido haya adoptado; por el contrario, el programa de gobierno consagrado en su II Congreso Nacional consta de 15 puntos de una oración cada uno, en los que se mezclan consignas como “reforma integral del sistema de salud” con ofertas como el programa “no te olvidaremos hermano”[7]. Recreando la fórmula lírica y personalista que llevó a Fernando Belaunde a la presidencia dos veces (con su célebre consigna “adelante”), Somos Perú actualmente tiene 419 regidores, 77 alcaldes y un presidente regional[8], cifras nada despreciables para una agrupación que no tiene una visión del país más allá que servir de vientre de alquiler para posibles candidatos.

Todo este análisis nos lleva a preguntarnos cuál será el futuro de Somos Perú luego de la escisión promovida por la viuda del fundador. La respuesta es bastante simple: no hay ninguna diferencia real si es que uno de los actuales alcaldes de Somos Perú candidatea con dicho partido o no, dado que la cohesión de la agrupación está basada en la pequeña burocracia que inscribe a los candidatos y la importancia de ser parte de un esquema mayor para candidaturas regionales. Si es que sólo se retiran el grupo que hasta hoy ha declarado, lo más probable es que Somos Perú mantenga su vigencia con la conformación de nuevos frentes y la aparición de nuevos candidatos, dado que al no tener aspiraciones presidenciales reales no genera ningún anticuerpo a la antipolítica imperante.

Somos Perú se muestra así como una interesante cantera de cuadros municipales, pero un ejemplo más de política sin objetivos a largo plazo ni instituciones nacionales que unan a un país históricamente fragmentado. De cierta forma Somos Perú dejó de ser un partido político al momento que Alberto Andrade dejó de tentar la presidencia y se ha convertido, exitosamente, en una agrupación municipal útil para los que ganen el favor de la cúpula dirigida por el ahora amo y señor de la institución Fernando Andrade.  





[1] http://diariocorreo.pe/ultimas/noticias/8404383/edicion+lima/ex-integrantes-de-somos-peru-forman-nuevo-pa
[2] http://www2.congreso.gob.pe/Sicr/Congresistas/2006/20060384.nsf/vf08web/911C0B2337FCCE91052574C2007349DB/$FILE/nota.pdf
[3] http://www.web.onpe.gob.pe/modElecciones/elecciones/RESUMEN/MUNICIPALES/10.pdf
[4] http://www.web.onpe.gob.pe/modElecciones/elecciones/RESUMEN/MUNICIPALES/18.pdf
[6] http://www.somosperu.org.pe/downloads/documento/Ideario.pdf
[7] http://www.somosperu.org.pe/index.php?plantilla=contenido&ncategoria1=101&ncategoria2=102&ncategoria3=157
[8] http://www.infogob.com.pe/Partido/ficha.aspx?IdOrgPol=14&IdTab=4